Manual del bronceado

 

Ahora que se acercan fechas, donde quien más o quien menos va a ir a la playa y/o a la piscina, y porque la exposición a los rayos solares se va a ver aumentada, desde Farmacia Olof Palme queremos informarte de las medidas que debes adoptar y los hábitos que debes mantener para «tomar el sol» de una manera segura.

 

Antes de ….

 

Protegernos con la alimentación

 

Existe una gran cantidad de alimentos en cuya composición podemos encontrar unas sustancias llamadas carotenoides, que hacen que el bronceado conseguido tras la exposición tenga un aspecto más natural y seductor que el que se obtiene únicamente por la radiación solar.

 

Así tenemos, entre los alimentos con mayor cantidad de carotenoides en su composición, y ordenados de mayor a menor, a zanahorias, nabos, col, berros, espinacas, boniatos o batatas, pimientos rojos, albaricoques, caquis, endivias, acelgas, tomates, mangos, lechugas, …

 

Estos alimentos realzan el moreno de la piel, ya que estimulan los tonos rojizos, anaranjados y amarillos en la piel, a diferencia de los rayos UV, que, aunque la tiñen más, no realzan esta pigmentación natural, dando lugar a un moreno «apagado».

 

Además los carotenoides, gracias a su alto poder antioxidante, fortalecen el sistema inmunológico y previenen del daño celular por acción de la radiación UV, y, por tanto, de la aparición de manchas solares o lo que resultaría peor, de lesiones cancerosas en la piel.

 

Conocer el fototipo

 

El fototipo es la capacidad que tiene la piel de un individuo de asimilar y, por tanto, protegerse, de la radiación solar.

 

En función de esta propiedad, se establece una clasificación por la cual se puede organizar a los individuos en función de la capacidad de defensa natural que tiene su piel frente a la radiación solar.

 

Es fundamental que un individuo conozca cuál es su fototipo y el comportamiento de su piel frente a la radiación solar para usar el fotoprotector adecuado y evitar así daños en la piel.

 

Chequeo a manchas y lunares

 

Las cifras de diagnóstico de melanoma a nivel mundial aumentan año tras año. Sin embargo, en países que han llevado a cabo medidas de concienciación ciudadana, estas cifras descienden. Sin ir más lejos, Australia, uno de los países más afectados por el debilitamiento de la capa de ozono, ha conseguido, gracias a un cambio en la mentalidad de sus habitantes frente a la radiación solar, que, cada año, los casos detectados sean menores.

 

Una de estas medidas es la revisión periódica de todo tipo de mancha cutánea por hiperpigmentación o por falta de esta.

 

Es preocupante que en España el 40% de la población no ha acudido nunca a la consulta del dermatólogo para revisar el estado de sus lunares y/o manchas. Por ello, si presentas alguno de estos signos, deberías acudir periódicamente a su revisión por parte de tu dermatólogo de confianza.

 

Evitar sustancias fotosensibles

 

Existen sustancias que predisponen la piel a sufrir efectos indeseados por la radiación solar.

 

Así, los AHA (alfahidroxiácidos), muy comunes en los cosméticos, aumentan la permeabilidad de la piel a los rayos UV, por lo que, ante la exposición solar, no debes aplicarlos sobre la piel o bien debes hacerlo por la noche.

 

En los repelentes de mosquitos es frecuente encontrar DEET (a base de dietiltoluamida), pero su presencia en la piel puede reducir hasta en un tercio la actividad del fotoprotector. Por ello, es muy importante seguir la siguiente pauta de aplicación: extender primero el fotoprotector y, al menos, media hora después, el repelente de mosquitos.

 

En lo que respecta al consumo de medicamentos, hay que tener especial cuidado si se consumen fármacos corticoides, anticonceptivos orales, antiacneicos (retinoides y peróxido de benzoilo), diuréticos, determinados antiinfecciosos (tetraciclinas y sulfamidas) y antidepresivos tricíclicos, pues fomentan la aparición de manchas solares o aumentan la sensibilidad de la piel a la radiación UV.

 

Durante la exposición …

 

¿Colonias/Perfumes? No, gracias

 

Un acto tan común como ponernos colonia antes de salir de casa, puede convertirse en un acto que nos conduzca a sufrir lesiones cutáneas (reacciones fotoalérgicas, manchas solares, …) si nos vamos a exponer a la radiación solar.

 

Hoy por hoy muy pocos perfumes han sido específicamente desarrollados para su uso bajo la radiación solar. Menos aún han demostrado no tener en su composición ingredientes fototóxicos y el fotoalergizantes. Por ello, desde Farmacia Olof Palme, recomendamos no usar perfumes si vamos a exponernos a la radiación solar.

 

El fotoprotector: con el IP adecuado, la cantidad segura y con la frecuencia requerida

 

El fotoprotector es el principal aliado a la hora de defendernos de los efectos de la radiación solar. Sin embargo, un error en cuanto al índice de protección (IP), la cantidad aplicada, o la frecuencia con la que reponemos el fotoprotector, puede conducir a sufrir quemaduras y/o lesiones en la piel de diversa consideración.

 

En cuanto al IP necesario en el fotoprotector, éste vendrá determinado por el fototipo del individuo, pues, de manera sencilla, podemos definir al IP como un factor multiplicador de la protección natural de la piel de un individuo. Por este motivo es fundamental saber cuál es el fototipo de cada uno, pues éste determinará el IP requerido. A menor fototipo, mayor tendrá que ser el IP del fotoprotector.

 

En cuanto a la cantidad de fotoprotector a aplicar en la piel, se debe tener siempre presente que ésta debe ser como mínimo de 2 mg por cm2 de piel. Desde Farmacia Olof Palme, somos conscientes que es difícil de comprender qué cantidad de fotoprotector supone esta cifra, por lo que recomendamos que con un fotoprotector de textura en crema, habría que extender la cantidad equivalente al tamaño del dedo índice para el rostro, orejas y cuello; duplicarla en cada brazo y en cada pierna, lo mismo que en el vientre, pecho y espalda (dos dedos por zona). En el caso de un fotoprotector en «spray» serían 12 pulverizaciones por cada una de las áreas anteriores. Y si fuera un fotoprotector en «stick», al menos cuatro pasadas de ida y vuelta.

 

La primera aplicación del fotoprotector debería ser media hora antes de comenzar la exposición y repetirse cada 2 horas (los filtros solares se desactivan al cabo de un tiempo) o inmediatamente tras un baño (aunque el fotoprotector sea resistente al agua o a prueba de ésta, estas calificaciones se obtienen tras una serie de ensayos en laboratorio en condiciones «ideales», difícilmente reproducibles en la realidad).

 

Si cumples todo lo referente al uso del fotoprotector, desde Farmacia Olof Palme, te animamos a que sigas con esos buenos hábitos, pero de no ser así deberías corregir aquellos aspectos «en los que fallas».

 

Después de …

 

Hidratar

 

Tras la exposición solar debemos reducir la posible rojez que pudiera aparecer, hidratar la piel y reponer el manto lipídico que cubre la piel.

 

A nivel corporal, debemos emplear lociones hidratantes (estilo «aftersun»), pudiendo incrementar la capacidad hidratante si usamos alguna loción que contenga urea. Es muy importante tras una exposición solar recurrir a un buen producto aftersun que cumpla las siguientes condiciones: calmante, suavizante, hidratante, antiinflamatorio y regenerador.

 

A nivel facial emplearemos cremas hidratantes en función de nuestro tipo de piel.

 

Evitar el daño oxidativo «en casa»

 

Recientemente se ha descubierto que se puede producir nuevo daño solar en el ADN de las células hasta cuatro horas tras de la exposición solar. La misma melanina, agente protector natural de la piel, es uno de los agentes implicados. Los radicales libres generados tras la exposición solar (por un mecanismo oxidativo que ésta genera), pueden provocar mutaciones en el ADN celular, a pesar de no estar bajo la incidencia de las radiaciones solares. Afortunadamente se puede prevenir este daño, aplicando cremas y sérums con altas dosis de sustancias antioxidantes (derivados estabilizados de las vitaminas E y C al 20%, resveratrol, …). Es muy importante no aplicar productos con retinoides.

 

Si tienes alguna duda al respecto de los productos mencionados o si necesitas que te ayudemos con la determinación de tu fototipo, no dudes en visitarnos. Estaremos encantados de poder atenderte.

 

Desde Farmacia Olof Palme esperamos haberte aportado los consejos necesarios para que puedas lucir un bonito y saludable bronceado.

 

 

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